Al pasar por la biblioteca y centro multimedia Eugenia T. Bumpass durante el día escolar, uno puede notar las caras sonrientes sentadas en el escritorio. Esos son los rostros de la secretaría de la biblioteca, Pam Matthews, y de la bibliotecaria Debra Forbes, quienes se aseguran de que la biblioteca funcione sin problemas, con la ayuda de la asesora en tecnología Nikki Waggoner.

Los estudiantes pueden asumir que la biblioteca es solo un lugar donde van a sacar libros o investigar, pero los bibliotecarios trabajan duro para asegurarse de que los estudiantes disfruten visitando la biblioteca y utilicen sus herramientas para tener éxito. El personal de la biblioteca trabaja con estudiantes y profesores a diario, distribuyendo cargadores y enseñando lecciones.

 Este es el primer año que Matthews trabaja como secretaria de la biblioteca, pero ha trabajado dentro del sistema escolar durante siete años. Algunos de sus puestos anteriores de secretaria incluyen trabajar en la oficina central, el departamento de deportes, la oficina principal y el departamento de suspensión dentro de la escuela.

   “Trabajar en la biblioteca es diferente de otros trabajos en la escuela porque puedes interactuar más con los estudiantes y ayudar a los maestros”, dijo Matthews. “Es muy emocionante y gratificante poder ayudar a otros”.

  Al igual que Matthews, este también es el primer año que Forbes trabaja en la biblioteca y en la escuela secundaria. Anteriormente, enseñó en escuelas primarias y secundarias y trabajó como instructora adjunta en la Universidad James Madison.

  “Mi trabajo favorito, con diferencia, es el de bibliotecario”, dijo Forbes. “Me encanta la variedad de instrucción y los estudiantes son increíbles”.

Para los estudiantes, estar dentro del aula todos los días puede resultar repetitivo y dificultar la concentración. El personal de la biblioteca puede trabajar con los maestros para que los estudiantes aprendan fuera del ambiente típico del aula.

Waggoner se encarga del lado de los medios de comunicación de la biblioteca, pero antes de unirse al personal de la biblioteca enseñó educación especial, en las escuelas primaria y secundaria. Colabora con los profesores para incorporar la tecnología en sus lecciones y también ayuda a los estudiantes con proyectos basados ​​en tecnología.

“He tenido oportunidades de enseñar conjuntamente con la Sra. Forbes y trato de agregar tecnología intencionalmente a las lecciones de la biblioteca”, dijo Waggoner.

   Algunos estudiantes tienen la oportunidad de trabajar como “asistente de biblioteca” durante el semestre. Estos estudiantes trabajan en estrecha colaboración con Matthews y Forbes para garantizar que se completen las pequeñas tareas. Estos asistentes hacen recados, se aseguran de que se devuelvan los cargadores y colocan los materiales en los buzones de los maestros.

“Ambos son muy amables y están llenos de buena energía”, dijo Sandra Davenport, asistente de biblioteca y estudiante de tercer año. “Entrábamos y decían “hola chicas” con una sonrisa”.

 Quienes trabajan en la biblioteca pueden establecer conexiones con los estudiantes que son diferentes a las de un maestro. Pueden trabajar con ellos individualmente mientras les enseñan una lección o les ayudan con una investigación o un proyecto.

   “Amo a mis alumnos y los veo todos los días, y odio cuando no estoy con ellos”, dijo Matthews.